Cómo mantener la sustentabilidad de la producción agrícola
Desde Iowa sumó su experiencia al Simposio de Suelos del XXVIII Congreso Aapresid “Siempre Vivo. Siempre Verde”, el Ing. Agr. Antonio Mallarino para hablar de “Nutrición en los sistemas de siembra directa: manteniendo la sustentabilidad de la producción agrícola”, tema del que es referente mundial y ya lo ha tenido como protagonista en citas anteriores. Hay una certeza: “La siembra directa es la más eficaz y económica práctica de conservación de suelos” “El uso eficiente los nutrientes y una apropiada conservación de suelos siempre ha sido importante para mejorar el beneficio económico de la producción. Pero esto es especialmente importante en estos tiempos con intensificación de la producción, precios desfavorables y creciente preocupación del público -y también de algunos gobiernos- respecto de impactos de la agricultura en la calidad aguas”, es el escenario que describió Mallarino. También compartió conceptos básicos y prácticos del manejo de fósforo y potasio en estas condiciones, con énfasis en siembra directa. Otro item de actualidad es la producción animal en confinamiento, que ha aumentado de manera muy creciente debido a la alta demanda mundial de carne y la necesidad de agregar valor a la producción de granos debido a los bajos precios. “Esto ha creado una concentración de la producción de estiércol y su mala aplicación al suelo está empeorando la calidad de aguas en muchas zonas y promoviendo regulaciones gubernamentales cuando es un valioso proveedor de nutrientes”, comentó. En este sentido analizó la disponibilidad de nutrientes del estiércol y su manejo racional para reducir el uso de fertilizantes minimizando la contaminación de aguas. Acerca de la intensificación de la agricultura Mallarino observó el aumento del tamaño de algunos predios causado por la baja rentabilidad y el aumento de la producción agrícola de manera empresarial en manos de grandes compañías, que generan una disminución de los establecimiento familiares que en general tienen producción agrícola-ganadera diversificada. Referido al maneja de fertilidad y la relación con la siembra directa se apuntó que “la mayoría de los conceptos claves para la fertilidad son los mismos con laboreo o con siembra directa”. “No hay magia ni milagros, especialmente para Fósforo y Potasio; hay que subir los niveles bajos en el suelo y mantenerlos con aplicaciones que aumentan en el tiempo”, mostró. Hay variantes que dependen del tipo de suelo, del clima, de las rotaciones, y de los precios. Otra de las observaciones la ligó con la tenencia de la tierra y la actitud de responsabilidad para invertir en nutrientes. De los conceptos considerados clave para el manejo de Fósforo y Potasio remarcó la calibración de métodos de análisis basado en ensayo de respuesta en rendimiento. También el buen muestreo de suelo, considerado “la base del buen manejo”, considerando la remosión para mantener los niveles deseados. En este segmento Mallarino sugirió usar métodos de aplicación eficaces que sean eficientes en la absorción y a la vez económicos y prácticos. Llamó a tener en cuenta que el nivel de rendimiento afecta a la remosión de Fósforo y de Potasio. La tecnología y disponibilidad de fertilizantes líquidos para Fósforo, Potasio, y ortros nutrientes ha mejorado notablemente y hay una oferta variada de buenos productos. Para concluir expuso los dos mundos paralelos que dice ver en los campos argentinos. “Muchos productores tiene las cosas claras, saben que mantener la fertilidad es crítico para que otros insumos, quizás más caros, den los beneficios que se esperan. Otros, arrendatarios o duelos de campo, tienen una visión cortoplacista y están como hace más de veinte años, y no quieren o tienen inseguridad para hacer la inversión en fertilizantes”. Dos recomendaciones: Se puede fertilizar para la rotación con métodos de aplicación baratos; y se puede dedicar tiempo y dinero para manejar mejor la fertilidad usando técnicas de agricultura de precisión.
Fuente. Congreso Aapresid 2020