Buena jornada del IPCVA sobre ganadería en Reconquista, Santa Fe
Una jornada plagada de datos técnicos de nivel que permiten vislumbrar un futuro auspicioso para la ganadería del NEA, fueron presentados en la Jornada Virtual organizada por el Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (IPCVA).
«La ganadería en el país va adoptando, se va acomodando, va incorporando cosas que le ocurren al resto de los procesos, al resto de los sistemas, como entre ellas, esta de las cuestiones de precisión de la información y la tecnología gestionada a través de instrumentos de trazabilidad electrónica, de sensorización, de gestión de procesos en forma algo más automática. Esto se enmarca dentro de las tendencias globales que hay asociado al sector de la producción de carne a nivel mundial», señaló el Ing. Agrónomo, Aníbal Pordomingo, en la Jornada durante su disertación sobre «Sistemas electrónicos para una ganadería de precisión y su importancia para el manejo y la trazabilidad animal”.
«Si listáramos cinco o seis procesos y desarrollos que están incorporándose en la ganadería del mundo, veríamos que una temática importante, un eje transversal en las ganaderías sobre todo de los países que hacen exportación de productos diferenciados o de productos de calidad, tiene que ver con la gestión automática remota, instrumentos para tomar decisiones en tiempo real y sobre todo asociado a la administración, al manejo del individuo o sea lo que se llama la gestión individual», señalaba Pordomingo.
«Una temática cruzada y muy relacionada con la primera es la de la gestión para la conversión, el uso de la genética, sobre todo la genética objetiva para mejorar aspectos de conversión de la alimentación; encontrar estos problemas de la dispersión alrededor de la conversión del alimento, tanto sea forrajes como alimentos concentrados».
«Otra temática no menor es toda la asociada a mirar el animal desde adentro, no solamente del aumento del peso o del peso vivo o el rendimiento de la carcasa, sino también de la contribución de las masas musculares a la carne o sea el rendimiento carnicero medida a través del área del ojo de bife, del espesor de grasa. O sea se ve cada vez más incorporación de estos atributos, de estos componentes del producto en las estructuras de los sistemas de producción, en la toma de decisiones en la gestión; elementos para mejorar la eficiencia y homogeneizar el producto».
Y agregaba el técnico: «En Argentina una de las primeras cosas que aparece cuando uno trata de encontrarse con estos conceptos de identificación de trazabilidad es que bueno justamente en la medida que uno coseche información individual o del individuo a lo largo del sistema de producción una de las cosas interesantes es que puede por ejemplo trazar hacia atrás, encontrar cuestiones o atributos que se expresaron en la carne, que se expresaron en etapas finales que están más próximas al consumidor, atributos verificables o modificables, posibles de manejar en las etapas tempranas. Entonces si podemos mirar a los individuos desde el final podemos tomar decisiones luego a través de sus relaciones con sus parientes y encontrar también la problemática de la dispersión».
«Entonces en la medida que podemos mirar para adentro al animal y podemos vincularlo al individuo podremos tomar decisiones mucho más inteligentes respecto de las generaciones futuras, las decisiones sobre manejo futuro, incluso para calificar origen. Podemos transmitir en distintos ejes de la cadena.
Entonces por eso la temática de trazar y de identificar animales de alguna manera y registrarlo en el tiempo siempre ha interesado».
«Las implicancias que tiene la tecnología en el seguimiento individual, nos permite empezar a conocer cosas importantes. La Argentina hace dos o tres años ya se introdujo en esto de medir las eficiencias de conversiones, el consumo residual. En este mapa vemos por ejemplo la gran dispersión alrededor de ese concepto de consumo, o sea los animales que comen más de lo esperado o que comen menos de los esperado para un determinado aumento de peso. Podemos ver que hay dispersión y que hay cosas muy interesantes, que hay animales que comen menos de lo esperado por ejemplo en el cuadrante inferior derecho, pero aumentan más de lo esperable para ese grupo. Consecuentemente podemos identificar como yo decía, animales eficientes, ver si eso se transmite a sus generaciones o su progenie, e incluso evaluar desde la progenie a los progenitores. O sea eso se está haciendo en muchas partes del mundo, va creciendo rápidamente»
«Las tecnologías de la precisión y de la electrónica se están miniaturizando y están desarrollando oportunidades, permitiendo rediseñar sistemas. Sobre todo, focalizados en esto de poder mirar al individuo en primer lugar. Y luego la detección o la sensorización y gestión remota de algunos puntos clave, que puede aumentar realmente la eficacia, la eficiencia del uso de los recursos que disponemos de nuestro sistema de producción».
Por su parte, el veterinario Natan Werner, asesor privado, se refirió a la determinación del score genital como herramienta de selección para posterior inseminación en vaquillonas de 15 meses de edad. Y comentó: «Se hace una clasificación de acuerdo al Score genital que presentan en ese momento las vaquillas a base de la escala de Anderson. Y se clasifican del 1 al 5, en las cuales las 1 son descartes por ser inmaduras y las otras recién un tratamiento a base de progestágenos para sincronización para ser inseminadas posteriormente a tiempo fijo con toros de bajo peso al nacer, con el fin de tener los menos problemas de distocia posible al parto y así evitar mermas y tener menos atención del personal», comienza explicando el experto.
«Esto nos permite hacer una clasificación temprana de las vaquillas en el cual ya se estaríamos refugando una parte de la vaquilla a una edad más temprana, a un peso no muy alto, por lo cuanto esta vaquilla no pierde valor en el mercado (la de refugo) poner el foco en las vaquillas que siguen posteriormente que serían las que va a ser la reposición del rodeo de cría».
Según indicó Werner, esto se viene haciendo hace varios años, por lo que se logró bajar los problemas de distocia que ocurren en la vaquilla de 15 meses. Para finalizar agregó que «se sigue continuando con este proceso y estas vaquillas después reciben un repaso, después de la inseminación a tiempo fijo, con todos los hijos de inseminaciones de bajo peso al nacer