El innovador plan que le valió a Machu Picchu la certificación “carbono neutral”
Machu Picchu estuvo soleada y con una temperatura ideal. Como propiciando un día de particular alegría. Y es que este 2 de setiembre la ciudad sagrada de los incas se convirtió en la primera Maravilla del mundo en obtener la certificación Carbono Neutral.
En medio de una fiesta y actos protocolares realizados en plena plaza principal de Machu Picchu pueblo, Green Initiative entregó la certificación de destino Carbono Neutral, una condición que se otorga al retirar de la atmósfera la misma cantidad de CO2 que se emitió.
De ahora en adelante, Perú podrá exhibir este logro que permitirá volver a poner la atención mundial en su mayor atractivo turístico, además de captar un tipo de visitantes que valoran los esfuerzos por combatir la contaminación, crear una cultura del reciclaje y reducir la huella de carbono.
Este es el resultado del trabajo realizado por la alianza estratégica entre dos empresas privadas, el Grupo AJE y la cadena de hoteles Inkaterra, en un unión con la Municipalidad de Machu Picchu y el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp). Desde el 2016 vienen implementando una serie de medidas para impulsar la mitigación de la huella de carbono.
“Estamos ante la nueva Revolución Natural, una era colaborativa. Este no es solo un ejemplo de gestión ambiental, es también un ejemplo de la nueva gestión para el mundo; cómo nos tenemos que unir todos para lograr este hito que es ser la primera maravilla Carbono Neutral”, indicó Jorge López-Dóriga, director global de Comunicaciones y Sostenibilidad del Grupo AJE.
Una de las acciones más importantes fue la implementación de dos compactadoras de residuos plásticos para el pueblo de Machu Picchu y el Camino Inca, cada una con capacidad de procesar siete toneladas diarias de desechos PET. A esta donación siguió la puesta en marcha de la planta de biodiesel, que evita la llegada de 1000 galones (más de 3700 litros) de residuos de aceite vegetal al río Vilcanota. Así se dio oportunidades de trabajo en la producción de combustible eco-amigable y en glicerina libre de químicos.
Otras iniciativas implementadas para el cuidado medioambiental por parte de los socios estratégicos son el pirolizador de residuos orgánicos: procesa basura orgánica a altas temperaturas para la obtención de bio-carbón y evita la emisión de gases de efecto invernadero (metano y dióxido de carbono). El biocarbón generado es usado por la comunidad como abono y por el Sernanp en sus tareas de reforestación del santuario. Finalmente, la trituradora de vidrio, que produce arena a partir de vidrio triturado, con lo cual se mitigará la extracción de arena de las riberas del río Vilcanota para así reducir la erosión que pone en peligro la integridad del pueblo de Machu Picchu.
“Trabajamos en la gestión integral de residuos sólidos, siendo el primer distrito en realizar el manejo de vidrios, la valorización de residuos orgánicos mediante el proceso de pirolización, la compactación de envases PET; y la gestión de aceites usados” señaló el alcalde de Machu Picchu, Darwin Baca.
La entrega de la Certificación Carbono Neutral busca reducir las emisiones de carbono en un 45% hacia el año 2030, y alcanzar las emisiones netas cero (carbono neutralidad) para el año 2050, conforme los lineamientos del Acuerdo de París.
Fuente: El Comercio (Ecuador)