Cosmética natural: desarrollaron un biopolímero sustentable y biodegradable
Luego de presentar esta innovación la compañía química BASF lanzó Cosmedia HP Starch, un nuevo biopolímero sustentable y biodegradable para cosméticos.
Se trata de biopolímero que funciona como un agente espesante eficaz con propiedades texturizantes que fue diseñado para preparaciones de emulsión y diferentes sistemas surfactantes. «Es fácilmente biodegradable (según los criterios 301D de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico -OCDE-) y se caracteriza, no sólo por su alta calidad, sino también por sus múltiples formas de uso», sumaron en un comunicado de prensa.
En formato de polvo blanco, Cosmedia HP Starch tiene un «carácter no iónico que permite una buena compatibilidad con diferentes ingredientes como catiónicos y anfóteros, y ofrece la posibilidad de desarrollar una variedad de formulaciones para una amplia gama de aplicaciones cosméticas, incluidos champús y acondicionadores para el cabello, styiling y formulaciones de protectores solares, entre otras».
“En BASF impulsamos soluciones cada vez más sustentables y Cosmedia® HP Starch es un ejemplo de ello, ya que deriva de materias primas naturales y es biodegradable, en un contexto donde la industria cosmética y los consumidores demandan productos más amigables con el planeta”, comenta Javier Nieves Piazza, Gerente de la división Químicos para el Cuidado Personal y del Hogar de BASF para Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay.
«Su desempeño texturizante contribuye a una buena fluidez y a perfiles sensoriales agradables. Sus propiedades permiten procesos de fabricación tanto en frío como en caliente, mostrando la alta flexibilidad de este biopolímero. De esta manera, Cosmedia HP Starch contribuye al futuro de la sustentabilidad en la industria del cuidado personal», sumaron.
Qué es un biopolímero
Un biopolímero es un tipo de polímero que se encuentra en la naturaleza y se produce a partir de materiales biológicos. A diferencia de los polímeros sintéticos, que se fabrican mediante procesos químicos a partir de productos petroquímicos, los biopolímeros son biodegradables y se obtienen de fuentes renovables, como plantas, animales o microorganismos.
Los biopolímeros pueden tener una amplia variedad de aplicaciones en diversos campos, como la medicina, la agricultura, la industria alimentaria y la industria del embalaje. Algunos ejemplos comunes de biopolímeros incluyen el almidón, el ácido poliláctico (PLA), el quitosano y la celulosa.
Tipos de biopolímeros
El almidón es un biopolímero que se encuentra en muchas plantas y se utiliza en la producción de materiales biodegradables, como bolsas y envases. El PLA es otro biopolímero ampliamente utilizado, que se obtiene a partir de recursos renovables, como el maíz o la caña de azúcar, y se utiliza en productos como envases, botellas y utensilios desechables.
El quitosano es un biopolímero derivado de la quitina, presente en los caparazones de crustáceos, y tiene aplicaciones en la industria farmacéutica y de alimentos. La celulosa, presente en las paredes celulares de las plantas, se utiliza en la producción de papel y materiales de embalaje.
Una de las principales ventajas de los biopolímeros es su capacidad para degradarse de forma natural, lo que reduce el impacto ambiental y la acumulación de residuos. Además, al ser obtenidos de fuentes renovables, ayudan a disminuir la dependencia de los recursos fósiles no renovables.
Los biopolímeros son polímeros biodegradables que se obtienen de fuentes renovables y se encuentran en la naturaleza. Estos materiales tienen diversas aplicaciones y su uso contribuye a reducir el impacto ambiental y promover la sostenibilidad.
Fuente: EconoSus