Sector agroindustrial exige «política de Estado exportadora» de cara a elecciones
El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA) llevaron a cabo la Jornada “Una Política de Estado Exportadora para la Argentina” en el Salón de Operaciones de la Bolsa de Cereales
Durante la misma el CAA y la CERA firmaron el documento conjunto “LINEAMIENTOS BÁSICOS PARA UNA POLÍTICA DE ESTADO EXPORTADORA” de carácter multisectorial, que contiene las bases para el desarrollo inclusivo de nuestro país.
De manera previa, las propuestas del sector fueron expuestas ante los equipos técnicos de los candidatos presidenciales de las principales fuerzas, y apuntan al marco institucional, legal y fiscal, así como a las «restricciones cuantitativas» y el «relacionamiento externo», planteando en este punto una «modernización del Mercosur».
«La Argentina debe considerar la exportación como motor del desarrollo económico, social y ambiental», con lo cual se convoca al «próximo gobierno y todas las fuerzas políticas», sostiene una declaración conjunta firmada por el coordinador general de CAA y presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), José Martins, y el presidente de CERA, Fernando Landa.
Martins, durante una rueda de prensa realizada este mediodía en la sede de la BCBA, planteó la necesidad de que la Argentina tenga «una política exportadora a 10 años como base para el crecimiento», al tiempo que señaló la «importancia estratégica» del trabajo conjunto con CERA en la formulación de políticas «para más exportaciones con valor agregado».
Landa, quien presentó el documento «Estrategia Nacional Exportadora», abogó por una «cooperación transversal» de los sectores productores y políticos.
Según el documento, la Argentina podría aumentar aumentar exportaciones a US$ 156.800 millones, 1,8 veces (2022 vs 2030), lo cual implicaría subir del 0,35% al 0,65% la participación del país en las ventas globales.
Además de la agroindustria, el análisis incluye las exportaciones que puede generar Vaca Muerta (US$20.000 millones) y recursos como el litio (US$4.500 millones) y el cobre (US$ 5.200 millones). La propuesta incluye «revisar y reformar el sistema impositivo a nivel nacional, provincial y municipal, el agregado de valor y la exportación, eliminando impuestos indirectos y derechos a las exportaciones».
De igual manera, se insta a «eliminar todas las cuotas, restricciones cuantitativas y toda medida que limite las exportaciones» y «los esquemas de permisos que supongan diferenciación entre bienes nacionales con aquellos del exterior y los permisos que afectan a servicios relacionados con la exportación».
En cuanto al relacionamiento externo, las entidades consideran «imperioso» desarrollar «una estrategia de Estado de inserción internacional estable, contemplando el fortalecimiento y modernización del Mercosur; eliminando medidas distorsivas y restricciones al comercio intrazona; promoviendo cadenas de valor regionales; y relanzando una estrategia agresiva y más dinámica para negociar acuerdos comerciales con otros bloques y países».
Para ello, pidieron «simplificar y agilizar los procesos de comercio exterior, reduciendo la burocracia y los obstáculos que dificultan las exportaciones».
En la rueda de prensa, Gustavo Idígoras, coordinador técnico del CAA y presidente de la Cámara de la Industria Aceitera Argentina y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-Cec), presentó los ejes del «Plan Federal Agroindustrial 2023-2033».
Idígoras dijo que apenas asuma el próximo gobierno, a través de un DNU debería desregular la exportación, «derogando cerca de 40 medidas burocráticas».
Las medidas burocráticas que se deberían dar de baja comprendería a las «restricciones cuantitativas a las exportaciones», poner en marcha «un programa de eliminación de los derechos de exportación», «quitarle al Poder Ejecutivo la facultad de establecer alícuotas» e «implementar la cuenta única de comercio exterior para que se pueda aplicar saldos favorables al pago de cualquier impuesto», entre otras cuestiones.