EE. UU. aportará US$3.000 millones para financiar cambio climático
Kamala Harris, vicepresidenta de EE. UU., ha acudido a la COP28, cumbre del clima que se celebra en Dubái, para tratar de despejar las dudas que pueda haber sobre la Administración de Joe Biden. Y ha anunciado desde esta ciudad de Emiratos Árabes Unidos una importante aportación al Fondo Verde de Naciones Unidas: 3.000 millones de dólares.
Este fondo es un instrumento ligado a las negociaciones que bajo el paraguas de la ONU se celebran desde hace tres décadas para combatir el cambio climático. Sus donantes son los países más ricos y los receptores son las naciones en vías de desarrollo.
El último gran anuncio de aportación a este fondo por parte de EE. UU. es del 2014, en la gestión de B. Obama. El demócrata ya tuvo problemas para que se materializara completamente esa promesa al no tener una mayoría en el Senado de su país.
Ayer, Harris, en su intervención en el plenario de la COP28, ha defendido las medidas que está desarrollando su Gobierno, como la masiva instalación de paneles solares y el desarrollo de los vehículos eléctricos.
El Gobierno estadounidense también anunció ayer nuevas reglas para reducir la contaminación provocada por las emisiones de metano de la industria petrolera y del gas.
Se exigirá a las petroleras que vigilen si tienen fugas en los lugares donde perforan para buscar gas y petróleo, y también que instalen un sistema de monitoreo a través de terceras partes, buscando así una mayor independencia en el proceso de supervisión.
Las nuevas normas evitarán que 58 mllns de t de metano alcancen la atmósfera entre 2024 y 2038, casi el equivalente a todas las emisiones de dióxido de carbono del sector energético en 2021.
Agencia EFE