Fabricantes extranjeros de maquinaria agrícola dicen que 2024 es un año con bajas ventas
Con un evento que convocó a autoridades del gobierno y periodistas del sector agropecuario, la Asociación de Fábricas Argentinas de Tractores y otros equipamientos agrícolas e industriales repasó su trayectoria y planteó los desafíos que enfrentará la producción agropecuaria a futuro.
Agradeciendo la presencia de los funcionarios y periodistas que acompañaron la celebración, Sergio Fernández, flamante presidente de AFAT, destacó que la asociación nació en la década del 70, cuando la industria tenía una manufactura integrada verticalmente,modelo que sefue diluyendo hacia los años 80 y 90, y que las empresas miembrodebieron adaptar sus estrategias para enfrentar los desafíos que se le presentaron. En el correr de estos 50 años la Asociación también acompañó esos cambios. “Hoy somos 8 empresas dedicadas a la maquinaria agrícola”.
Fernández resaltó que las empresas socias poseen 12 plantas industriales, localizadas en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba donde fabrican tractores, cosechadoras, pulverizadoras, motores e implementos. En 2023 estas fábricas, a través de sus distintas marcas, representaron el 80% de los patentamientos de tractores; 97% de las cosechadoras, 100% de las picadoras de forraje, y el 58% de pulverizadoras.
A continuación, el nuevo presidente de AFAT enumeró una serie de desafíos que enfrentará el sector agroindustrial argentino en los próximos años, como Eficiencia; Tecnología; Sustentabilidad; Trazabilidad; Renovación del parque; desarrollo de Proveedores e Infraestructura. Desafíos para los que los miembros de esta asociación tienen mucho que aportar.
Eficiencia. “En 2050 se van a necesitar un 40% más de alimentos en el mundo, y no hay recursos para alcanzar ese volumen en la forma que estamos produciendo hoy. Obviamente debemos ser más eficientes en el uso de los recursos. Nuestras empresas, que son globales. viendo esto plantean estrategias a largo plazo. Estrategias en las que Argentina es vista como un gran jugador a la hora de alimentar al mundo”.
Tecnología. La eficiencia va de la mano de la tecnología.Como país“tenemos que seguir incorporando tecnología. Nuestras empresas invierten millones de dólares en investigación y desarrollo de lo que se conoce como agricultura digital. Y es impresionante lo que eso genera, por ejemplo, 30% menos de semillas usando siembra variable o corte por sección. En aplicaciones 70% de ahorro gracias a la inteligencia artificial. Y en la cosecha, hasta un 15% menos de pérdidas. Nosotros ponemos a disposición del país estas tecnologías de agricultura digital”.
Sustentabilidad. El desarrollo tecnológico apunta a un mundo más sustentable. “El mundo cada vez demanda más bajar la huella de carbono, el consumo de agua, la generación de residuos: Todas nuestras empresas están trabajando en eso. El país lo necesita para hacer una agricultura eficiente y sustentable”.
Trazabilidad. El aporte a la sustentabilidad debe ser visible. “Los consumidores quieren saber más cómo se producen los alimentos y nuestras empresas tienen la tecnología necesaria para lograr esa trazabilidad”.
Renovación del parque de máquinas. Buscar la eficiencia, incorporar tecnología, requiere una renovación sustancial de la maquinaria en uso. “Tenemos un parque que raya la obsolescencia, con un 70-80% de tractores con más de 15 años, 70-80% de cosechadoras con más de 10 años. Renovar ese parque e incorporarle toda la tecnología disponible es otro desafío y a la vez una gran oportunidad”.
Desarrollo de proveedores. El crecimiento empuja al desarrollo. “Tenemos muchos (proveedores) con mucho potencial”. Hay que continuar trabajando para alcanzar “los estándares de calidad, costos y (tiempos de) entregas para exportar. Desde AFAT trabajamos con INTI e IRAM para lograr que esos proveedores puedan exportar componentes de la maquinaria. También podemos abrir nuestras empresas para que esos proveedores (alcanzados esos estándares) aumenten la escala”.
Infraestructura. Para el desarrollo en general y el uso acabado de toda esta tecnología, “Nos falta infraestructura, desde caminos rurales hasta rutas, logística en general, riego y también conectividad”.
“Argentina necesita seguir avanzando hacia una agricultura eficiente, rentable y sustentable y este grupo de empresas globales pueden ayudar, y mucho. Para ello nos ponemos a disposición”, Continuó Sergio Fernández, Presidente de AFAT.
“Hoy tenemos un desafío muy grande como asociación y como país. Estamos en un año de muy bajo volumen de ventas, un 30% por debajo de 2023”. Un año que, a su vez, estuvo alejado de los volúmenes normales de mercado, donde se deberían vender entre 7.000 y 8.000 tractores, entre 1.000 y 1.200 cosechadoras y 800 o 900 pulverizadoras. “Al mismo tiempo, tenemos una presión impositiva muy fuerte y distorsiva que penaliza la fabricación y exportación”. Aliviar esta presión y resolver la escasez de crédito son la clave para que el sector vuelva a crecer, aumentando las inversiones en bienes de capital de alta tecnología, lo que redundará en beneficio del país.