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¿Es peor la calidad del aire dentro de tu casa que fuera? Nuevos estudios lo confirman

Resulta difícil imaginar que el aire que respiramos dentro de nuestras casas pueda ser menos saludable que el que respiramos fuera, especialmente cuando vivimos en entornos urbanos. Pero en ocasiones, el aire de puertas adentro puede estar tan contaminado o más que el de la calle.

Un equipo de expertos de la Universidad de Birmingham en el Reino Unido ha descubierto que la calidad del aire dentro de nuestros hogares puede empeorar cuando el aire transporta contaminantes hasta el interior. Para entender porque, se han usado sensores que miden esos contaminantes con bastante precisión y otras técnicas de última generación.

La zona donde se ha realizado el estudio está en un barrio ubicado al suroeste del centro de la ciudad de Birmingham en el Reino Unido. Los hogares de la zona tienen entre 4 y 5 personas viviendo en ellos. En sus casas usan gas tanto para el sistema de calefacción como para el horno, pero la vitrocerámica es eléctrica. 

Partículas y otros contaminantes que se cuelan en nuestras casas

Los resultados muestran que los niveles de partículas (PM) pueden aumentar dentro de nuestras casas en determinadas condiciones. Investigados tres hogares, se observa que los niveles de PM en uno de ellos superaron el límite que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es un dato que muestra la importancia que tiene monitorear la calidad del aire interior a en una determinada ubicación del hogar.

Una de las principales investigadoras del estudio, Catrin Rathbone, destaca la necesidad de monitorear la contaminación del aire interior, el que respiramos en nuestros hogares. A veces el aire exterior puede estar más limpio que el que tenemos dentro de nuestras casas y ni lo imaginamos.

El equipo señala que factores como la ubicación del hogar, la ventilación y los patrones de ocupación influyen en los niveles de partículas, lo que demuestra la complejidad de  entender bien porque varía tanto la calidad del aire interior.

Hay cinco factores principales que pueden ayudar a aumentar la concentración de partículas en el aire del interior de las casas. Dos están relacionados con actividades que se llevan a cabo de puertas adentro, como puede ser una mayor movilidad de los residentes en casa. Los otros tres parecen estar vinculados a factores externos, como puede ser la cercanía de un respiradero de cocina de un restaurante. 

Otros contaminantes que pueden deteriorar la calidad del aire interior

En un estudio diferente, científicos de la Universidad de Purdue en estados Unidos han descubierto que el aire contaminado puede originarse dentro de nuestros hogares. ¿Cuántas veces hemos puesto ambientadores en algún lugar de nuestro hogar para aromatizar el aire que respiramos? 

Pues bien, algunos ambientadores, la cera derretida, los productos de limpieza de suelos o incluso los desodorantes, pueden llegar a ser en ocasiones perjudiciales. Usándolos dentro de casa aportamos partículas lo suficientemente pequeñas como para que penetren profundamente en los pulmones.

Estas nanopartículas se forman cuando las fragancias interactúan con el ozono, y este se cuela en edificios a través de sistemas de ventilación. El ozono se mezcla con otros compuestos químicos y las reacciones químicas resultantes pueden generar compuestos perjudiciales para la salud.

Esos productos de limpieza que a veces compramos con olor a bosque, pinos u otros aromas exóticos, en el fondo son productos llenos de aromas fabricados químicamente para simular un determinado escenario a la vez que desinfectar. Sin embargo, generan una gran cantidad de contaminación en el aire interior que no es nada buena para el sistema respiratorio. 

Dejar las ventanas abiertas en determinados momentos del día puede ayudar a empeorar la calidad del aire que respiramos. foto: Unsplash

Las nanopartículas de tan solo unos pocos nanómetros de tamaño pueden penetrar profundamente en el sistema respiratorio y extenderse a otros órganos. Lo cierto es que aún queda mucho por entender en materia de contaminación interior. Preocupa por ejemplo el efecto que puede tener inhalar sustancias químicas volátiles resultantes de diferentes reacciones químicas como la mencionada del ozono. 

Habitualmente cuando se forman nanopartículas las concentraciones suelen ser muy altas, una situación que sin duda supone un importante riesgo para la salud. En un futuro tendremos equipos de monitorización de la calidad del aire en diferentes espacio de nuestros hogares para tomar las oportunas medidas antes de que afecten a nuestra salud.